“Megalópolis” es una película enigmática, que ha sufrido obstáculos desde la creación de su guión. Fue en los 80s que el reconocido director por primera vez imaginó el mundo enorme, absurdo y simbólico que se ve en el filme, pero por la rareza de los temas no pudo encontrar inversionistas dispuestos a producirlo.
Por otro lado, mientras pasó el tiempo y con los trágicos eventos terroristas de los años 2000, que tenían similitudes palpables con eventos que se verían representados en la cinta, ésta se vio atrapada en medio de un clima político complicado para su filmación. Más de un par de décadas y cien millones de dólares después, “Megalópolis” al fin ha estrenado en Cannes, si bien no cuenta aun con distribución oficial.
Megalópolis: una apuesta arriesgada
De lo que se sabe sobre “Megalópolis” podemos resumir un duelo entre dos hombres que buscan llevar una ciudad recientemente destruida por caminos diferentes. Uno, interpretado por Adam Driver y de nombre Cesar Catalina, es un arquitecto idealista con cierta habilidad de detener el tiempo y que pretende construir sobre el derrumbe un futuro utópico. El otro, interpretado por Giancarlo Esposito y de nombre Franklyn Cicero, busca el regreso a la normalidad de la ciudad, con la construcción de casinos.
Entre ambos se dibuja un drama de proporciones épicas, inspirado en dramas grecoromanos y de Shakespeare, y filmes como “Ciudadano Kane“, al igual que la nunca despreciable participación de Terry Gilliam. Lo que nadie ha podido negar es que es un filme cuyo origen se encuentra en el corazón del director y que fue labrado con la pasión y sacrificio del mismo, como bien evidencia la inconmensurable inversión del propio Ford Coppola en la película, que se calcula en los 130 millones de dólares.
¿Apocalipsis ahora?
Según las reseñas especializadas, “Megalópolis” intenta hacer una crítica la sociedad estratificada, un enfoque que sin embargo lucha contra sí mismo por la distancia que tuvo la filmación con el orgien del guión, que es de hace casi 40 años. Por otro lado, se reporta que, en un intento por parte de Ford Coppola de crear personajes simbólicos o arquetípicos, éstos pierden verosimilitud y se descarrilan hacia actuaciones que rayan en momentos con lo caricaturesco.
Para sumar a la controversia, durante las semanas previas al estreno de “Megalópolis“, todo tipo de reportes sobre la conducta inapropiada y según ciertas fuentes abusiva del director han causado polémica sobre la ya divisiva recepción del filme.
El filme, que se configura como una de las producciones independientes más caras de la historia, mantiene al menos un atractivo en cuanto a su espectáculo visual, sello casi requerido por la firma de Francis Ford Coppola, pero sobretodo por la curiosidad que generará para el público la intensa ambición con la que se llevó a cabo el proyecto y los aspectos más bizarros que ofrece.
A final de cuentas
“Megalópolis” hace gala de un reparto increíblemente repleto de talento, con actuaciones por parte de Dustin Hoffman, Jon Voight, Jason Schwartzman, Shia LaBeouf, Nathalie Emmanuel, Aubrey Plaza, Lawrence Fishburn y Chloe Fineman, lo cual por lo menos es capaz de despertar la curiosidad de público.
No obstante, dentro del contexto de su producción, “Megalópolis” representa un evento cinematográfico como ningún otro en la historia del cine, que para los fanáticos del celuloide es fascinante simplemente por su existencia.
Mientras tanto, y si eres un fanático de Francis Ford Coppola, y los filmes más audaces y vanguardistas, independientemente de su resultado final, te invitamos a revisar el avance y a estar atento para cuando se anuncie la distribución del “Megalópolis” y puedas acudir a algún cine a ver esta polémica película.