En este episodio de Chainsaw Man vemos que la sangre de demonio está por todos lados, en los semáforos, la acera, el asfalto y los restos de las entrañas del demonio están siendo recogidos por funcionarios del gobierno. Todo es un caos y Makima mira fijamente a los responsables del desastre. Ni Denji y ni Power saben aún el correcto proceso para luchar en contra de un demonio cuando este llega a la ciudad, por lo que les jala de las orejas, claro, sin perder la usual calma que le caracteriza. La poseída busca cómo liberarse del asunto, pero no surte efecto y misteriosamente resulta afectada por las palabras de Makima al pedir que guarden silencio.
La jefa del equipo poco ortodoxo les confiesa que no le interesa de quién haya sido la culpa, pese al regaño escueto que les dio, sino que espera verlos en acción y que entreguen cuentas. Ante esto, Denji se da cuenta muy pronto, y con un refresco de gas en la mano, que no podrá cumplir su sueño del momento. Desea con todas sus fuerzas seguir teniendo la vida que tiene ahora, por lo que las mentiras y efusividad de Power lo estropea todo. Así que, Denji es sincero con la poseída y esta también lo es al confesarle que no se puede llevar bien con los humanos.
Con un gato entre sus manos y recargada sobre unos refrigeradores, le explica que este sentimiento es propio de los demonios, pero que también odia a uno que le ha secuestrado a su gato. Y es aquí cuando surge la oportunidad de Denji de poder cumplir su sueño de manosear unas tetas si ayuda a Power a rescatar a su gato. Un plan sin tanta planificación surge y nuestro querido Chainsaw Man firma la salida de la poseída Power y se encaminan a rescatar al felino.
A bordo de un tranvía a plena luz del día entre los dos comienza a surgir un momento importante, Denji le comparte que una vez tuvo una relación importante con Pochita, quien ya se encuentra en su corazón, literalmente; algo que no puede entender del todo la poseída. Mientras que estos dos se encuentran juntos, Makima tiene una reunión con las altas esferas de Seguria Pública para reportar la recién llegada de Power al equipo.
Una vez acaba la reunión, Aki Hayakawa le pregunta a Makima por qué es que Denji forma de Seguridad Pública cuando no tiene nada bueno que aportar. Una vez escuchada su duda, la jefa le responde mirando por la ventana que Denji está dentro del equipo porque su transformación en el demonio de las sierras le parece interesante, respuesta que no satisface para nada al pelo oscuro. El día sigue su transcurso y Denji con Power llegan a una casa abandonada en donde se supone que su gato Nyanko se encuentra secuestrado por un demonio, pero algo va mal, Denji lo presiente y termina inconsciente por obra de Power.
Power lo arrastra al interior de la casa y se lo presenta al demonio de los Murciélagos que tiene secuestrado a su gato. Denji yace en el suelo, no se puede mover y la razón por la que se lo entrega al demonio es para que cure sus heridas. Cuando prueba la sangre de Chainsaw Man se retuerce de agonía, pues su sangre no es para nada deliciosa. Completamente recuperado de sus heridas, el demonio amenaza con cazar su siguiente víctima en la ciudad, Denji recuerda brevemente el regaño de Aki y Power es tragada por el demonio de los Murciélagos al comerse a su gato antes que a ella.
El demonio de los Murciélagos, alza el vuelo manteniendo en mente su plan para quitarse ese mal sabor de boca y Denji se le cuelga de la pierna con la intención de recuperar a Power (y las tetas que le fueron robadas). Pero, Denji sabe que más por cumplir su deseo vulgar, entiende lo que Power sintió en el momento en el que se comieron a su gato y se transforma en el Demonio de las Motosierras.
Destruyen edificios, pelean en plena calle, los escombros vuelan, Denji advierte a los que se encuentra de que escapen y la lucha entre ambos demonios comienza. En esta pelea Denji debió haber muerto, pero no sucede y el ruido de las Motosierras se escuchan, la pelea comienza de nuevo, pero esta vez el Demonio de los Murciélagos está asustado ante la presencia de Chainsaw Man porque sabe que su muerte está cerca.
Denji lucha por sus sueños con más fuerza
Este tercer episodio de Chainsaw Man nos ha dejado ver una nueva interacción de Denji con otro personaje que no sea Makima y Aki. Tatsuki Fujimoto, el creador de la historia, ha puesto sobre la mesa el cómo actuaría el protagonista con otra mujer que no sea la que lo trae vuelto loco y sí, no actúa como un perrito faldero a los pies de Power, pero reconoce que es una mujer. Los atributos que tanto le gustan los tiene de pies a cabeza la poseída, por lo que su áspera relación no impide que la barra con la mirada de vez en cuando.
Además, Denji sigue firme en cumplir sus sueños y Power se lo ha prometido, razón por la que se mantiene a su lado. De esta forma los primeros lazos de este chico con otros seres humanos comienzan a establecerse, lo que le da más peso a la historia y al futuro de Chainsaw Man. No sólo es que Denji quiera tocar las “tetas” de una mujer, sino que sabe que su vida es muy diferente a la que tuvo cuando trabajaba para los yakuzas, por lo que no quiere perderla tan fácilmente.
Así que, es muy probable que Denji siga trabajando para otros, además, esto lo recuerda Makima cada que aparece en escena. Quien nos recordó en este episodio que Power fue capturada por ella también. Hubo un momento al inicio del episodio que la poseída actuó temerosa, como si algo malo pudiera pasarle por mano de Makima, lo cual también dejó mosqueado a Denji. Sin embargo, la importancia de nuestro chico con el corazón de Pochita deja en claro que madura cada vez, lo que nos hace preguntar si realmente es tan poderoso como se promete.
Chainsaw Man nos enseña a apreciar las cosas simples de la vida
En este punto estoy como Aki Hayakawa, pues Denji me provoca cierto dolor de cabeza por la personalidad tan simple, pero quizá eso es lo que necesita este anime. No todos los protagonistas pueden estar llenos de venganza y tener sed por demostrar algo que pueden ser. No es necesario que de manera inmediata el personaje sea odiado o pertenezca a un clan poderoso para poder tener un buen trabajo o que sencillamente le vaya bien en la vida.
Aquí Denji sigue demostrando que sí, es un personaje simple al querer conservar la vida sosa que tiene. Dejó de estar en las calles, de vivir bajo un techo de lámina, de no poder comer bien o de preocuparse porque en algún momento tendrá que vender algún órgano suyo para saldar alguna deuda heredada. Ya no más y quiere seguir como se encuentra, por lo que se siente este sentimiento de apreciar las cosas simples de la vida.