Steven Spielberg nos ha traído grandes historias al cine, desde los dinosaurios del pasado, hasta los extraterrestres con tecnología futurista, nos ha contado sobre viajes en el tiempo y viajes a dimensiones virtuales, sin embargo poco se sabía de la vida de este gran director, productor y guionista. Después de 2 años de estár encerrado Spielberg llegó a la conclusión de que era momento de contar su propia vida.
Así es como nace “Los Fableman”, la película semibiográfica de la vida de Steven Spielberg en su etapa de infante, adolescente y de joven adulto. La película, según Spielberg, trató de recrear casi en su totalidad todos los aspectos de su vida cuando niño, como que las casas se vieran como las que su padre compraba o que su familia de verdad se sintieran como las personas que interpretaban.
El poder del cine es, claramente, uno de los grandes hilos de “Los Fableman”, y Spielberg lo maneja con mucho cariño. Sam hace pequeñas películas de guerra, western y familiares para compartir con sus seres queridos, y es muy gratificante ver cómo mejora en cada una de ellas.
Soluciona aspectos técnicos, por ejemplo haciéndole hoyos a la película para que se noten disparos en su western, aprende a dirigir actores transmitiéndoles toda la emoción que él siente o hasta hace a un lado riñas porque le es imposible ignorar a una estrella cuando la tiene a cuadro. Definitivamente se nota la evolución en cada pequeña película que Sam va creando.
¿De qué trata? (Spoilers)
La película de “Los Fableman” comienza con Sammy Fableman a los 5 años junto a sus padres, esperando en la fila para poder entrar al cine. Aunque Sam al principio se muestra impaciente y dice que quiere irse, su padre le habla de las maravillas de la tecnología que ha logrado que imágenes estáticas se muevan.
Sam, Burt (su padre) y Mitzy (su madre), entran al cine a ver “El más grande show en el mundo” (1952), donde Sammy se queda impactado al ver como un tren arrolla a un vehículo. Desde entonces la vida del joven Sam Fableman cambiaría para siempre.
Crece y ahora de adolescente hace películas con sus amigos, familiares y el tío Benny, mejor amigo de su padre. Estas películas las transmite en su club de boys scouts, sin embargo su padre le da la noticia a toda la familia que se tienen que mudar a Arizona, por lo que toda la familia y el tío Benny cambian de vida.
Un día, para mejorar los ánimos de la FAMILIA, Burt lleva a todos a acampar y Sam graba todo. Es en este momento en el que nos damos cuenta que Mitzy no está tan bien del todo mentalmente y que entre ella y el tío Benny hay algo.
Meses después la madre de Mitzy muere y ella entra en una gran depresión. Burt nota que su esposa cada vez está más distante y no solo por lo de su madre, por lo que le pide a su hijo hacer una película de el día del campamento. Durante esa noche Mitzy recibe una llamada de su madre muerta diciendo que algo terrible va a ocurrir y al día siguiente los visita el tío Boris, quien toda su vida se dedicó al performance en circo.
En un momento de la noche el tío Boris y Sam hablan de corazón a corazón y el tío, entre palabra y palabra, le dice que siga sus sueños y sea realmente fiel a estos ya que el arte destrozará a la familia. Varios días después, mientras Sammy edita la cinta se da cuenta que en cámara captó a su madre y al tío Benny siendo infieles. Sam se queda enojado con su madre.
Meses después se vuelven a mudar, esta vez a California y sin el tío Benny. Por esto último Mitzy entra en otra depresión y a manera de escapismo comienza a hacer cosas impulsivas como comprar un mono. Mientras tanto Sam es bulleado por los chicos en su escuela, pero gracias a eso conoce a Mónica, la que se termina convirtiendo en su novia.
Sam se ve incapaz de tomar una cámara otra vez después de darse cuenta que gracias a estas observó la infidelidad de su madre, a pesar de ello por presión de su familia y su novia, vuelve a tomar una para filmar el viaje escolar de la generación de su escuela y se vuelve a enamorar de filmar y editar películas.
Burt y Mitzy explotan y deciden divorciarse, lo que es un duro golpe para Sam y sus hermanas. Sam sintiéndose muy mal, va de todas maneras al baile de graduación, donde muestra su película del viaje de generación. Mónica rompe con él al este confesarle su amor y los bulleadores hacen la paz con él.
2 años después Los Fableman están separados, Sam y su padre se encuentran en Hollywood, Sam está teniendo un colapso mental porque no ya no puede con la universidad y por primera vez su padre lo apoya diciéndole que si de verdad quiere trabajar en cine y dejar la universidad, que lo haga. Sam logra conseguir un trabajo en los estudios donde su ídolo John Ford trabaja y este le enseña lo más importante para un cineasta “Si el horizonte está muy abajo o muy arriba es interesante, si está en medio es aburrido ¡Ahora salte de mi oficina en este momento!”
Lo Bueno
En “Los Fableman”, Spielberg, es Spielberg dejándose fluir, tiene un maravilloso uso de la fotografía, todas las escenas son un deleite visual con composiciones hermosas que crea. Incluso para las escenas de transición te muestra y deja bien en claro donde estamos, cómo se siente Sam y la diferencia entre ambientes de los estados.
Me gustó mucho algo que hace años no veía a Spielberg usar, prácticamente desde Volver al Futuro, si el director quiere mostrar una reacción de algún personaje, no hace un corte con un primer plano al rostro, sino que en una sola toma el personaje se acerca a la cámara, muestra su reacción que normalmente es acompañado con un diálogo y después se aleja para dar paso a que siga la escena o muestre la reacción de otro personaje. Es un sello de Spielberg que cada vez había estado viendo menos en sus películas, pero me da mucho gusto que lo haya retomado.
La dirección de arte es perfecta. En todo momento sientes que estás en la época en la que estás, ya sea por atuendos, peinados, o los maravillosos sets y locaciones que Rick Carter usó para la película. Me imagino lo complicado que fue, ya que no es una película de pocas locaciones y un año en específico, sino que nos vamos desde los 50´s hasta los 60´s a lo largo de Texas, Arizona y California.
La caracterización que el maestro David Lynch hace de otra leyenda del cine John Ford deja sin palabras a las personas que entendemos quienes son estas dos figuras magníficas del cine. Es una de las mejores caracterizaciones que he visto en mucho tiempo y fácilmente se roba el final de la película.
Lo malo
“Los Fableman” es una muy buena película en todo el apartado técnico, sin embargo tengo dos problemas con la película, uno es en el departamento de maquillaje y otro es el guion, pero comencemos con el maquillaje, donde parece que todos Los Fableman tienen la misma edad a lo largo de 10 años.
No hay maquillaje para mostrar el envejecimiento de los personajes ¡No hay!… Es nulo, inexistente. Al principio de la película veo a Paul Dano (Burt) de 30 años en los 50´s y con un hijo de 5 años, y al final de la película veo a Paul Dano de 30 años en los 70´s y con un hijo de 20 años. No puedo creer que ni un poco de arrugas le pudieran poner ¡Ponle más grisaseo el pelo, no puede ser! ¡Hazle lo que sea, pero no lo dejes como un señor de la misma edad!
Lo mismo va para Michelle Williams (Mitzy), en ningún momento hay un maquillaje que exprese como han pasado los años en el rostro de Gabriel LeBell (Sammy). ¡Que me estás poniendo a un niño de 15 años y al final un adulto de 20 años y ni arruga en los ojos le salen!
El segundo apartado es el guion, toda la primera mitad de la película está muy bien escrita, incluso amo cómo está escrito el tío Boris, no obstante de la segunda mitad en adelante cae más fuerte que un avión sin alas. La madre se vuelve una niña adolescente que se cree chistosa porque está loca, no tienen mucho sentido las bases de la relación de Mónica y Sam.
Pero donde me perdí y me dije a mi mismo “¿Qué carajo estoy viendo?” es la subtrama con los bullies de Sam, tan solo este llegar al colegio ya lo quieren matar. Se supone que son antisemitas pero incluso antes de que sepan que Sam es judío ya le dicen hasta de qué se va a morir su madre, y a final, cuando el prota muestra a los bullies como las estrellas de la generación…¿Estos se enojan?…¿Qué? Pasé de ver la vida de Steven Spielberg a una romanticomedia barata de niños en la prepa con personajes unidimensionales.
Pese a todo esto anteriormente dicho el final de “Los Fableman” es hermoso, me llegó hasta lo más profundo de mis negras entrañas. Es una carta de amor a todas las personas que algún día queremos llegar a hacer cine y en algún momento nos hemos desesperado por ello.
Veredicto veredictoso
Toda la parte técnica de “Los Fableman” es increíble, pero el guion y maquillaje chafean, a veces muy fuerte durante la película, sin embargo fuera de eso el final es super esperanzador. Se merece un Oscar por dirección de arte.
Le doy 8.5 volveres al futuro de 10. Buena película y a veces muy buena, pero definitivamente no su mejor creación.
